Los aceites esenciales han aumentado su popularidad en los últimos años. Estos aceites perfumados y altamente concentrados se extraen de plantas y existen al menos 3000 variedades. Algunos de ellos se han utilizado como medicamentos naturales durante siglos. Los más entusiastas afirman que los aceites esenciales pueden utilizarse para tratar todo, desde la caspa hasta la acidez estomacal, mejorar los estados de ánimo, aumentar la energía e incluso mejorar el aprendizaje y la memoria.
Posibles beneficios de los aceites esenciales
Los aceites esenciales pueden ayudar a:
• Combatir las caries y la enfermedad de las encías. Algunos aceites esenciales, como el árbol del té y el eucalipto, se agregan a los enjuagues bucales y a los dentífricos. De esta forma, pueden ayudar a reducir la cantidad de bacterias en la boca. No es necesaria la aplicación directa.
• Tratar la candidiasis. La candidiasis es una infección que causa manchas blancas en la boca. Los aceites de clavo de olor, canela, limón y árbol del té contienen antioxidantes que ayudan a combatir la infección por candidiasis.
• Aliviar la ansiedad y el dolor durante los momentos estresantes. Los aceites de lavanda y naranja son los favoritos de la aromaterapia. Pueden ayudar a promover la relajación y el alivio del estrés.
• Refrescar la respiración. El sabor mentolado y la sensación de limpieza fresca que obtiene de la pasta dental, las encías y el enjuague bucal suelen provenir del aceite esencial de menta.
Posibles inquietudes con los aceites esenciales
Los efectos secundarios de los aceites esenciales incluyen:
• Acidez estomacal, náuseas y vómitos. Estos problemas pueden ser especialmente frecuentes si consume aceites esenciales sin diluirlos primero.
• Fatiga, dolores de cabeza y boca reseca. Estos efectos secundarios pueden producirse cuando consume altas dosis de un aceite esencial.
• Reacciones alérgicas y tóxicas. Puede experimentar erupciones, ronchas, ampollas y una sensación de ardor al aplicar aceites esenciales directamente sobre la piel.
• Dientes y encías dañados. La aplicación directa de aceites esenciales en la boca puede provocar erupciones, ronchas y ampollas, igual que si se aplica sobre la piel.
• Complicaciones potencialmente graves como intoxicación, convulsiones y daño renal y hepático.