Evita la exposición al sol tras su utilización. Algunos aceites son fotosensibilizantes, es decir, que al contacto con la radiación solar puede producir alteraciones en la piel, marcas, manchas, prurito, picor, enrojecimiento… La mayoría de aceites esenciales fotosensibilizantes son los cítricos: limón, naranja, bergamota, pomelo…
- No aplicar directamente sobre la piel.
- No ingerir.
- No poner en contacto con ojos o mucosas.
- Consultar con un experto para su uso en caso de embarazo, lactancia, niños, enfermedades y alteraciones cutáneas severas. En caso de embarazo ten especial cuidado, porque algunos aceites esenciales estimulan el riego sanguíneo en útero y pelvis.