Los aceites esenciales son muy útiles para el tratamiento de pedicura, para suavizar la piel y para disminuir la hinchazón que se acumula a lo largo del día en las piernas y los pies. En general, añada seis gotas de aceite esencial en un barreño de agua y agite el agua antes de introducir los pies para que se extiendan los aceites uniformemente. Ponga los pies en remojo durante diez o quince minutos moviéndolos de vez en cuando. Después del remojo envuélvalos en una toalla durante otros quince minutos. Termine el tratamiento con un masaje en los pies y pantorrillas con un poco de aceite para masajes que contenga algunos aceites esenciales.