Nuestros hijos han vuelto al colegio, y un año más sus lindas cabezas se exponen a los temidos piojos, que tienden a moverse con una asombrosa facilidad por el cuero cabelludo de los niños (especialmente de las niñas que suelen llevar el pelo más largo). Aunque los piojos son también cosa de adultos y pueden atacar a profesores, madres, padres, etc.
Puedes utilizar todo tipo de repelentes, pero están demasiado expuestos como para que funcionen tan bien como nos gustaría. Piensa que en el colegio comparten todo tipo de objetos (colchonetas, gorras, cojines…) que facilitan el contagio, además de realizar numerosas actividades en grupo que favorecen la proximidad ideal de sus cabezas para que los piojos corran de una a otra. El síntoma más evidente de que los piojos han llegado es el picor que les obliga a rascarse mucho la cabeza. Presta atención a esto y revisa su cuero cabelludo con frecuencia.
En la farmacia disponen de muchos productos que eliminan los piojos del cuero cabelludo, y también hay centros especializados que por un coste mayor aseguran acabar con los piojos en una sola visita (aunque nadie te garantiza que no vuelvan pasados unos días). Además de estas soluciones más estándar, existen remedios caseros que pueden ayudarte a solucionar este problema tan molesto.
Aceites esenciales
Puedes aplicarlos en el cuero cabelludo, pero siempre diluidos en aceite de oliva y nunca en niños menores de 4 años. Son efectivos el aceite de lavanda, el de árbol d té, el de eucalipto, el de romero o el de geranio. Disuelve en 50cl de aceite de oliva 20 gotas de aceite esencial y deja actuar durante la noche.