El desequilibrio hormonal puede causarnos muchos problemas, como cambios de humor, ira, ansiedad, fatiga, tristeza, depresión, peor aún, suicidio.
Se supone que los aceites esenciales no son el único tratamiento, pero actúan como un soporte para el centro de control de nuestro cuerpo, el hipotálamo, una región del cerebro que produce, libera y regula las hormonas.
Al equilibrar los niveles hormonales como los niveles de estrógeno, progesterona, cortisol, tiroides y testosterona, el hipotálamo es muy importante para nuestras funciones fisiológicas diarias, como la temperatura corporal, la sed, el hambre, el sueño, el estado de ánimo e incluso el deseo sexual.
Para las mujeres, los aceites como la salvia, el geranio y el tomillo ayudan a equilibrar los niveles de estrógeno y progesterona, lo que mejora enormemente la fertilidad y ayuda a los dolores y molestias del síndrome premenstrual.
El aceite de menta, por otro lado, puede afectar las hormonas del estado de ánimo como la serotonina y los neuropéptidos, mejorando la claridad de su mente.